Medir en tiempo real las condiciones de los caudales y niveles de nieve existentes en nuestra region es una de las funciones que tiene la Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas. En Biobío este servicio es parte fundamental en los pronósticos de deshielos y disponibilidad de recurso hídrico en el periodo estival, razón por la que sus equipos deben estar en perfectas condiciones para que a la hora de entregar la información necesaria para enfrentar posibles emergencias (sequias) esta sea lo más exacta posible.
Es por esta razón que los profesionales la DGA trabajaron durante este fin de semana en la modernización de la estación de nivométrica ubicada en la Reserva Nacional Ñuble, específicamente en el sector Alto Mallines a 1800 metros sobre el nivel del mar, una de las dos existentes en nuestra región, ya que la segunda se sitúa en el volcán Chillán.
Según explicó el seremi de Obras Públicas, René Carvajal, “la modernización de esta estación nos permitirán obtener datos de mejor calidad necesarios para la gestión del recurso hídrico, considerado los años de sequía que estamos enfrentando y junto con ello el poder contar con el volumen de agua total almacenado y su aporte a los caudales durante los deshielos y así conseguir los datos de predicción de caudales durante la temporada estival”.
En tanto el Gobernador de la Provincia de Biobío, Luis Barceló, reconoció el esfuerzo y dedicación de los profesionales de la DGA al “instalar estos nuevos instrumentos de monitoreo de nieve, ya que la precisión de estas nuevas herramientas es prácticamente total, lo que nos permitirá saber con exactitud la cantidad de agua que tendremos durante las épocas posteriores”.
MODERNA TECNOLOGÍA
Las especificaciones técnicas de este sistema las entregó el director regional de la DGA, César Saavedra, quien señaló “actualmente en este lugar existe un sensor de temperatura ambiental y humedad relativa, llamado snow pillow, lo que nos permite saber cuánta nieve se acumuló durante el invierno, dato de vital importante para aquí conocer su equivalente en agua almacenado en la parte alta de la cuenca del río Laja”.
Agregó “lo que hicimos fue instalar dos nuevos sensores que permitirán mejorar la información obtenida con equipos de última generación. Uno de ellos es el snow scale, el cual permite medir el peso de la nieve con mediciones que van desde los 2 milímetros, lo cual equivale a dos kilos de nieve. El segundo equipo es un sistema ultrasónico que permitirá conocer la altura de nieve almacenada con niveles de precisión de milímetros”.
Esta inversión de seis millones de pesos en equipos de última generación en Alto Mallines, a través de la cual se obtiene datos de la nieve acumulada desde 2002, permitirá fortalecer la calidad de información entregada por la DGA a los diferentes servicios que lo necesiten.